Esta es la segunda entrada de la serie "Okupas". En un polígono industrial con parcelas sin ocupar describimos las plantas que allí se han instalado. En una entrada anterior describimos las primeras plantas que ocuparon el terreno: Pioneras. En esta, nos ocuparemos de las que las suceden. Las Secundarias.
Secundarias
En el Polígono Araso, las plantas secundarias ya se han establecido. Junto a los chopos se observan algunos ejemplares jóvenes de
Fraxinus excelsior (Fresno) y dos de Aacer pseudoplatanus (Arce blanco). Estos árboles son distintos en comparación con los pioneros. El Chopo tiene una esperanza de vida de hasta 200 años en solitario, pero en competencia con árboles secundarios, puede bajar hasta 50 años. A medida que los competidores vayan creciendo, irán haciéndole sombra al chopo, debilitándolo hasta la muerte. El fresno (derecha) es un árbol secundario adaptado a la competencia, con una esperanza de vida de 100 años en esas condiciones. El Arce blanco (abajo) es un gran competidor, capaz de alcanzar hasta 40 metros de altura y una esperanza de vida de hasta 500 años.
Por esta razón y por la gran cantidad de semillas que produce y su germinación eficaz, el Arce blanco está catalogado como especie invasora.
Entre las herbáceas, sobresale aquí y allá Cortaderia selloana (Hierba de las Pampas). Proveniente de Argentina, se ha extendido entre nosotros y por todo el mundo. Se instala en terrenos pobres y removidos alcanzando alturas de unos 3 metros. Lo consigue gracias a su potente y profundo sistema radicular que le permite obtener recursos desde profundidades de varios metros.
Helminthotheca echioides (Lengua de gato), Symphyotrichum sabulatum (Metezurras) y Pulcaria dysenterica (Pulicaria) pertenecen a un grupo de la familia de las Asteráceas que, tienen rizomas: estructuras radiculares similares al tallo en grosor y consistencia, que pueden almacenar sustancias nutritivas y anclan de manera firme a la planta en el suelo. Los rizomas facilitan la penetración de suelos compactos.
Clinopodium douglasii (Yerbabuena), Mentha suaveolens (Mastranzo) y Mentha aquatica (Menta aquática, derecha)
pertenecen a la familia de las Lamiáceas. Es una familia bien conocida en Euskal Herria, porque las hemos manejado mucho a lo largo de la historia. Estas plantas forman una tupida red de raíces y porducen brotes exploradores que se extienden rápidamente por la superficie en busca de nuevos lugares de enraizamiento. Esta propiedad les ayuda a establecerse de manera muy competitiva, allá donde las condiciones (humedad y altos niveles de nitrógeno) les favorecen.
Trifolium pratense, el común Trébol rojo, es una leguminosa que sucede a sus primas pioneras. Al igual que ellas, se vale de la estrecha relación con las bacterias fijadoras de nitrógeno, Rhizobium, para conseguir el nitrógeno que necsita, pero su modo de crecimiento es más vivaz. Por eso, se emplea como cultivo de cobertura en la agricultura.
Amaranthus hybridus (Amaranto, abajo, derecha) es pariente de la remolacha y la espinaca. Es una conocida planta ruderal (que aparece en los bordes de caminos).
Tiene una raíz profunda y consistente, unida a un tallo frondoso que eleva la planta hasta un metro de altura. Esta estructura le permite captar luz todo el día. Produce muchas flores y semillas. En condiciones desfavorables, si la parte aerea muere o es arrancada, la raiz puede regenerar una nueva planta.
Rumex obtusifolius (Acedera, abajo) es una planta muy común en nuestras praderas. Sus ámplias hojas dispuestas en una roseta sirven para cubrir plantas de menor porte. Su raiz alcanza hasta un metro de profundidad, accediendo así a nutrientes fuera del alcance de sus competidores. Sin embargo, al morir, sus hojas se descomponen, liberando nutrientes para los siguientes participantes en la sucesión.
Diez Características Distintivas
Las plantas conocidas como "maleza" son un grupo heterogéneo que a nuestro juicio están fuera de sitio o fuera de lugar en un contexto creado o gestionado por nosotros. Según ese contexto, una planta puede considerarse como maleza o no. Por ejemplo, el antes mencionado Trebol rojo es una planta empleada por nosotros en algunas prácticas agrícolas, con mucho éxito. En ese contexto no es maleza. Sin embargo, cuando lo encuentran los jardineros municipales en un jardín, lo es!
Sin embargo, podemos decir que las plantas consideradas como maleza comparten bastantes, aunque no necesariamente posean todas las siquientes diez características:
Modos diversos de reproducción: sexual (semilla) o asexual (brotes, fragmentos de raíces o esquejes). Así como a veces debemos ser muy cuidadosos para conseguir que nuestras plantas se reproduzcan, este no es un problema cuando se trata de las malas hierbas. El Mastranzo, por ejemplo, produce muchas semillas que germinan la primavera siguiente. Pero el más pequeño brote es capaz de generar una planta. De hecho, cuanto más destrozos hagamos tratando de removerla, mayor será la fuerza con la que rebrote!
Producen muchas semillas. La Hierba de las Pampas (abajo) produce unas 50.000 semillas por cada panícula. Cada planta podría dispersar más de medio millón de semillas!
Tienen semillas muy pequeñas. Esta propiedad tiene que ver con la anterior, porque el número suele ser inversamente proporcional al tamaño de las semillas. Pero el pequeño tamaño tiene otras ventajas. Las semillas pequeñas se pueden alojar en cualquier grieta o recobeco. Además, facilitan la dispersión en algunos casos. El Chopo produce semillas de 3-4 mm de diámetro envueltas en una pelusa de algodón que les permite desplazarse transportadas por el viento.
Cuentan con formas especializadas de dispersión. El Arce blanco y otros miembros de su familia producen semillas con forma de aspa que les permite planear. Por otra parte, Conyza canadiensis y otros miembros de su familia producen semillas en forma de paracaídas, capaces de mantenerse suspendidas en el aire sin necesidad de mucho viento.
Si se intentan arrancar de cuajo, la parte subterranea que queda puede regenerar la planta. Pulcaria dysenterica y los mejor conocidos miembros del género Taraxacum, como el Diente de León, cuentan con puntos en la base del tallo que permiten que se desprenda la parte aerea. La raíz penetra hasta medio metro de profundidad y queda sujeta al suelo, con capacidad de regeneración de la planta entera.
Las raíces o el tallo son rizomas, capaces de almacenar reservas y sobrevivir largos periodos en estado latente. Ejemplo:, Rumex obtusifolius.
Capaces de soportar condiciones muy difíciles. Sequía, altas temperaturas, salinidades altas o lugares donde prácticamente no hay sujeción. Ejemplo: Symphyotrichum subulatum (Metezurras).
Altas tasas de crecimiento. Rubus ulmifolius, conocida entre nosotros como la Zarzamora, es capaz de extenderse más de 10 cm cada día en meses de verano, pasando por encima de las plantas competidoras, quitándoles la luz.
Semillas capaces de mantenerse viables en estado latente. William Beale, profesor e investigador en la Universidad de Michigan estaba ocupado en evitar las pérdidas causadas por las malas hierbas en los cultvos a mediados del siglo XIX. A medida que se sucedían las campañas, Beale observaba que las mermas eran mayores y decidió que debía entender mejor la biología de las malas hierbas para poder combatirlas. Beale hipotetizó que las semillas de las malas hierbas podían mantenerse en estado latente durante periodos largos, y que eso les permitía emerger regularmente, a pesar de que las arrancásen nada más verlas salir. Diseñó un experimento en el que mezcló 1000 semillas de distintas malas hierbas, las mezcló y depositó 50 semillas de la mezcla en cada una de 200 botellas de vidrio que contenían una mezcla de suelo y arena. En 1879, enterró todas las botellas boca abajo y sin tapar, para que tuviesen comunicación con el entorno. Cada cinco (5) años, desenterraba una botella y ponía las semillas a germinar. Las semillas germinaron con éxito, hasta el punto que en 1920, los sucesores de Beale decidieron aumentar el periodo entre las pruebas de 5 a 10 años. En 1990, preocupados por no poder llegar determinar el periodo de latencia por agotamiento de las botellas, el plazo se alargó a 20 años. A día de hoy, 143 años después de iniciarse el experimento, siguen germinando las semillas de Beale, aunque en número decreciente. La última publicación de los resultados se puede ver pinchando aquí. El repositorio de semillas en estado latente en el suelo de un tereno se denomina el Banco de Semillas. Según técnicos de la Universidad de Californoa, un campo puede albergar entre 1000 y 30.000 semillas latentes por metro cuadrado. Por tanto, las plantas han desarrollado estrategias de supervivencia a corto plazo, pero también a largo plazo. Para más documentación sobre este tem, ver esta referencia.
Alelopatía. Las plantas pioneras están adaptadas para sobrevivir en condiciones muy agresivas, y ello ya supone una exclusión de otros competidores. Sin embargo, las secundarias están adaptadas a la competición y poseen mecanismos como: hacer sombra a los vecinos, colonizar agresivamente el suelo o reducir el crecimiento del competidor. Este último mecanismo se denomina Alelopatia. Se conoce la Alelopatía positiva (fomentar) y la negativa (perjudicar) el crecimiento. En este caso, sólo daremos ejemplos de la segunda. Mentha spicata, conocida como Hierbabuena, libera compuestos capaces de inhibir el crecimiento del maíz y seguramente tiene efectos sobre otras plantas. La familia de las Mentas son conocidas por sus compuestos volátiles y se ha registrado que estos pueden inhibir la germinación de otras semillas! El Amaranto emplea una estrategia similar. En este caso, se ha comprobado que inhibe el crecimiento de distintas hortalizas. Estos no son más que un par de ejemplos sobre una materia que es muy ámplia y todavía necesita de muchos estudios.
Conclusión
Lo queramos o nó, la Maleza consiste de plantas que surgen contra nuestra voluntad . Por eso las aborrecemos y las despreciamos.
Pero hay que admitir que su éxito está íntimamente ligado a nosotros: muchas de ellas han llegado traídas por nosotros y las hemos promovido creando los entornos donde mejor se adaptan. Cuando pretendemos castigarlas, vuelven!
Además, las malas hierbas son las pioneras en la recuperación de suelos que nosotros dejamos abandonados. Con el tiempo, pueden darle la vuelta a algún estropicio urbanístico que hemos dejado, reduciendo la erosión, atrayendo insectos o alimentando a los pájaros. Pueden ser fuente de sustancias naturales de aplicación culinaria o médica, o incluso de algunos materiales interesantes. La médula de alguna de ellas se ha empleado para limpiar joyas, otras sirven para cubrir tejados y los árboles dan madera, sin cuidarlos.
Para terminar, la aparición de las malas hierbas en nuestros entornos nos indica, humildemente, que nuestro dominio sobre la naturaleza es transitorio.
Propuesta
Después de escribir estas entradas me he encontrado con las "malas hierbas" del Polígono Araso en muchos lugares. Te invito a que te fijes en las plantas en los bordes de parques, paseos y parcelas en desuso. La mayoría son fáciles de identificar comparándolas con las fotos o los enlaces del texto. Otra opción es bajar una de las aplicaciónes gratuitas para la identificación de plantas.
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